El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser
El arte en algunas de sus obras más importantes, ha sido observador declarante de la historia y la continuidad de un cierto proceso de "naturalización" por la que el cuerpo femenino ha sido botín de guerra. Las autorías que ilustran a través del tiempo "el rapto", y en alguna med...
Autor principal: | |
---|---|
Formato: | Online |
Idioma: | spa |
Publicado: |
Universidad de Costa Rica
2016
|
Acceso en línea: | https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/escena/article/view/25588 |
id |
ESCENA25588 |
---|---|
record_format |
ojs |
spelling |
ESCENA255882021-06-09T18:48:22Z El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser Solorzáno, Alejandra dolor cuerpos femeninos guerra Sujeto ontología arte ser femenino El arte en algunas de sus obras más importantes, ha sido observador declarante de la historia y la continuidad de un cierto proceso de "naturalización" por la que el cuerpo femenino ha sido botín de guerra. Las autorías que ilustran a través del tiempo "el rapto", y en alguna medida la justificación de robo, sometimiento y sacrificio de mujeres a causa de su belleza como recompensa de guerra, revelan un problema vigente y crítico sobre nuestra contemporaneidad, el secuestro del cuerpo por sobre la anulación del Ser femenino. Importantes obras de arte que registran de forma bella y acrítica, sucesos de la mitología tales como el rapto de Europa, el secuestro de Perséfone, las Sabinas, el sacrificio de Ifigenia, por mencionar algunas, fundamentan las bases de una maquillada “justificación” de la violencia sexual y la esclavitud femenina, que en la historia del mundo, casos como el de Boc Dong Kim y las “mujeres de solaz” o “mujeres de confort” de Corea, China, Filipinas, Malayas, entre otras (Segunda Guerra Mundial), y el caso de las mujeres de Sepur Zarco en Guatemala (1980-1983), son ejemplos de un doble crimen de guerra. Se anula al Sujeto femenino por la instrumentalización de su corporalidad. La belleza como mandato social y asignación de género es un enemigo profanador de la constitución ontológica del ser femenino. La mujer como cuerpo y el cuerpo que le es despojado. En tanto, el arte ha sido un testigo pasivo y quizá, en su indolencia, legitimador. Universidad de Costa Rica 2016-07-11 info:eu-repo/semantics/article info:eu-repo/semantics/publishedVersion Contribution Contribución application/pdf https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/escena/article/view/25588 10.15517/es.v75i2.25588 ESCENA. Revista de las artes; Vol. 75 No. 2 (2016) ESCENA. Revista de las artes; Vol. 75 Núm. 2 (2016) Escena; Vol. 75 N.º 2 (2016) 2215-4906 10.15517/es.v75i2 spa https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/escena/article/view/25588/25934 |
institution |
Universidad de Costa Rica |
collection |
ESCENA. Revista de las artes |
language |
spa |
format |
Online |
author |
Solorzáno, Alejandra |
spellingShingle |
Solorzáno, Alejandra El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser |
author_facet |
Solorzáno, Alejandra |
author_sort |
Solorzáno, Alejandra |
description |
El arte en algunas de sus obras más importantes, ha sido observador declarante de la historia y la continuidad de un cierto proceso de "naturalización" por la que el cuerpo femenino ha sido botín de guerra. Las autorías que ilustran a través del tiempo "el rapto", y en alguna medida la justificación de robo, sometimiento y sacrificio de mujeres a causa de su belleza como recompensa de guerra, revelan un problema vigente y crítico sobre nuestra contemporaneidad, el secuestro del cuerpo por sobre la anulación del Ser femenino. Importantes obras de arte que registran de forma bella y acrítica, sucesos de la mitología tales como el rapto de Europa, el secuestro de Perséfone, las Sabinas, el sacrificio de Ifigenia, por mencionar algunas, fundamentan las bases de una maquillada “justificación” de la violencia sexual y la esclavitud femenina, que en la historia del mundo, casos como el de Boc Dong Kim y las “mujeres de solaz” o “mujeres de confort” de Corea, China, Filipinas, Malayas, entre otras (Segunda Guerra Mundial), y el caso de las mujeres de Sepur Zarco en Guatemala (1980-1983), son ejemplos de un doble crimen de guerra. Se anula al Sujeto femenino por la instrumentalización de su corporalidad. La belleza como mandato social y asignación de género es un enemigo profanador de la constitución ontológica del ser femenino. La mujer como cuerpo y el cuerpo que le es despojado. En tanto, el arte ha sido un testigo pasivo y quizá, en su indolencia, legitimador. |
title |
El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser |
title_short |
El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser |
title_full |
El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser |
title_fullStr |
El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser |
title_full_unstemmed |
El Arte, un espectador de la Guerra. Del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del Ser |
title_sort |
el arte, un espectador de la guerra. del dolor de los cuerpos femeninos a la profanación del ser |
publisher |
Universidad de Costa Rica |
publishDate |
2016 |
url |
https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/escena/article/view/25588 |
work_keys_str_mv |
AT solorzanoalejandra elarteunespectadordelaguerradeldolordeloscuerposfemeninosalaprofanaciondelser |
_version_ |
1809192622517911552 |