| Sumario: | A partir de 1999, con la llegada de Hugo Chávez a la presidencia de Venezuela, las relaciones políticas se han involucrado en una creciente imposición de sanciones que han afectado el entorno local venezolano. Estas responden a los intereses de Estados Unidos, los cuales tienen la intención de determinar los procesos políticos y diplomáticos que deben seguir los países en función de sus intereses geopolíticos, lo que ha llevado a la confrontación entre ambas naciones. El objetivo de este artículo es dar cuenta de las sanciones económicas que unilateralmente viene imponiendo el país del norte como parte de su política de potencia en declive. Asimismo, se busca mostrar la forma en la que dichas medidas de sanción se han desarrollado en diferentes momentos desde el año 2014 hasta el 2022. Se utiliza un estudio cualitativo de revisión bibliográfica que posibilita un análisis sistemático y crítico en relación al tema. En las conclusiones se reflexiona en torno al punto de inflexión que representa para Venezuela el conflicto entre Rusia y Ucrania al colocarla nuevamente en el ajedrez geopolítico. Se hace un análisis con respecto al acercamiento del Departamento del Tesoro de Estados Unidos con Venezuela para negociar un relativo levantamiento o flexibilización de las sanciones, dada la prohibición de comprar recursos energéticos como gas y petróleo a Rusia.
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