| Sumario: | La historia, así como sus diversos procesos políticos, económicos y sociales, marcan un antes y un después, deben ser de interés para la sociedad pues suponen un cambio ya sea leve o radical. Para este artículo, la historia es el actor principal que modifica el orden internacional; los procesos de guerra en Europa inician desde 1517 con Martin Lutero, considerado como el punto de partida de las guerras. En sus inicios fue por la religión, pero posteriormente, transitó hacia la lucha por el comercio y territorios hasta culminar con la paz de Westfalia, que determina los principios del orden internacional que aun hoy en día persisten. Las guerras, pese a ser el método de resolución de conflictos más violento y trágico deja algo bueno, y así fue como la llamada “Gran Guerra” gestó el nacimiento de la Sociedad de Naciones que para la época era algo inconcebible, que jamás había existido un ente supraestatal que se le comparara; en este mismo contexto surgen las organizaciones internacionales, de la soberanía, de la autodeterminación, de la importancia de la paz internacional, todos frutos de la “Gran Guerra” y aunque la paz no fue duradera, sirvió como base fundamental para el nacimiento de Naciones Unidas, ente del Derecho Internacional Público cuyo propósito es preservar la paz y la seguridad internacional, ya sea de manera voluntaria o siendo coaccionado.
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