Vivir en transición en el Estado de México: : Nahuas, purépechas y totonacas resistiendo en la sobremodernidad

En el pueblo de San Francisco Tepojaco, Cuautitlán Izcalli, Estado de México, existen migrantes que pertenecen a las etnias nahua, purépecha y totonaca. Su construcción identitaria se da de forma dinámica y multivalente poniendo en evidencia que revisar sus sistemas de pertenencia es uno de los gran...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Galindo Castro, Saira Genoveva
Formato: Online
Idioma:spa
Publicado: Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, UNAN-Managua. 2023
Acceso en línea:https://revistashumanidadescj.unan.edu.ni/index.php/Raices/article/view/975
Descripción
Sumario:En el pueblo de San Francisco Tepojaco, Cuautitlán Izcalli, Estado de México, existen migrantes que pertenecen a las etnias nahua, purépecha y totonaca. Su construcción identitaria se da de forma dinámica y multivalente poniendo en evidencia que revisar sus sistemas de pertenencia es uno de los grandes retos de la sobremodernidad. El presente artículo cientifico es el resultado de un análisis etnográfico realizado acerca de asentamientos indígenas dentro del pueblo ya mencionado. Los procesos y las prácticas que llevan a cabo en los nuevos espacios de residencia, lejos de su lugar de origen, constituyen escenarios multifacéticos y peculiares en la conformación de su sentir étnico, lo que representa una resistencia cultural. Los resultados de la investigación explican que las identidades étnicas en la sobremodernidad tienen la característica de ser efímeras, cambiantes e indefinidas, ya que se rigen por el contexto antroposociohistórico en el que acaecen. Así, sus sistemas de pertenencia se redefinen constantemente según el tiempo y el lugar dónde se encuentren. Derivado de esto los migrantes étnicos que buscan establecerse en espacios de transición rural-urbanos están conscientes de que jugaran de forma ambivalente con los elementos que los definen según sean las circunstancias en las que se encuentran. Con el trabajo de campo se comenzaron a cuestionar los paradigmas que se tenían y se abordó una mirada desde una perspectiva sociocultural y más neutral centrándose en las particularidades y relativismos desde la visión del nativo, pero sin perder la cuestión interpretativa de la que precisa la ciencia antropológica. La entrevista cualitativa también se usó como técnica para confirmar la información proporcionada por los sujetos de estudio.