| Sumario: | El quehacer universitario, sobre todo el de una universidad pública, es importante para el desarrollo de país, ya que las posibilidades de progreso de un país dependen en mucho de la clase de universidad pública que tenga. Esta tesis, válida en términos generales, debe contrastarse con la evidencia histórica. Al hacerlo, es posible descubrir momentos en que la universidad, el estado y los intelectuales coincidan y se conviertan en factores de desarrollo. A la inversa, es posible ver que cuando se distancian, el desarrollo se dificulta y la sociedad, como un todo, pierde. Para ilustrar este problema, se toman en este artículo dos momentos históricos: uno que va de 1870 a 1920, enmarcado en la consolidación de un modelo agroexportador, y otro que se da a mediados del siglo XX, en el cual se buscó desarrollar una industria de sustitución de importaciones.
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