Sumario: | El Mercado Oriental de Managua es un espacio ambiguo, en el cual conviven lo moderno y lo tradicional, lo campesino y lo capitalista. La llave para comprender esta pequeña "ciudad en la ciudad" es analizar el complejo entramado de relaciones sociales que la caracteriza. A través del análisis de las relaciones que los comerciantes entablan entre sí y con los clientes, se pueden observar peculiares mecanismos de intercambio y reciprocidad, que tienen sus raíces en los mercados tradicionales indígenas. La mirada etnográfica ha permitido sumergirse por debajo de la superficie económica del mercado, para fijarse en lo que pocos observan: lo no documentado de la vida de los comerciantes, que de hecho son los protagonistas del mercado, y dinamizan este espacio físico, resignificándolo como espacio de interacción social.
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