No quiero ser segua o afán de perennidad de belleza

Juzgar una obra dramática como lectores es más difícil que hacerla como espectador; porque aquellos pueden saltarse algunos signos del escenario, mientras que el espectadorlos tiene todos ante sí.La segua, escrita por el dramaturgo nacional, Alberto F. Cañas, se halla articulada por tres diferentes...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Fonseca, Virginia
Formato: Online
Idioma:spa
Publicado: Universidad de Costa Rica 2006
Acceso en línea:https://revistas.ucr.ac.cr/index.php/filyling/article/view/15031
Descripción
Sumario:Juzgar una obra dramática como lectores es más difícil que hacerla como espectador; porque aquellos pueden saltarse algunos signos del escenario, mientras que el espectadorlos tiene todos ante sí.La segua, escrita por el dramaturgo nacional, Alberto F. Cañas, se halla articulada por tres diferentes códigos: el literal, que corresponde a la historia amorosa de Encarnación; el paralelo, recoge las mutaciones maravillosas de esa historia; el derivado, conlleva un intento de trascendentalización