Los manglares como ecosistemas prioritarios para aumentar la resiliencia ante el cambio climático: Retos y oportunidades en el Pacífico de Guatemala.: Español

Los manglares se distribuyen en las zonas tropicales y subtropicales del planeta. Se ubican en zonas inundables, en suelos de alta salinidad y anaerobios. Estos bosques son reconocidos como ecosistemas fundamentales para el mantenimiento de la resiliencia ante el cambio climático en los hábitats mar...

Descripción completa

Detalles Bibliográficos
Autor principal: Schoenbeck, Maria A.
Formato: Online
Idioma:spa
Publicado: Universidad de San Carlos de Guatemala 2022
Acceso en línea:https://revistas.usac.edu.gt/index.php/cytes/article/view/1111
Descripción
Sumario:Los manglares se distribuyen en las zonas tropicales y subtropicales del planeta. Se ubican en zonas inundables, en suelos de alta salinidad y anaerobios. Estos bosques son reconocidos como ecosistemas fundamentales para el mantenimiento de la resiliencia ante el cambio climático en los hábitats marino-costeros ya que actúan como defensa ante tormentas y tsunamis, además participan en la estabilización microclimática y en la absorción de CO2. Sin embargo, estos ecosistemas han disminuido a través de los años debido a factores principalmente antropogénicos; se prevé que el cambio climático también influirá negativamente en su conservación. En el pacífico de Guatemala se ha registrado una cobertura de 22,763.25 ha de bosque de manglar, compuestas por seis especies. A pesar de lo anterior, únicamente el 23% está protegido dentro del sistema de áreas protegidas, por lo que, la cobertura vegetal de manglar ha disminuido a través de los años debido a cambios de uso de suelo, crecimiento urbano, contaminación, tala ilegal, entre otros. Asimismo, existen diversos retos que dificultan su conservación, como la falta de ordenamiento territorial y falta de conocimiento legal. Es necesario realizar acciones que promuevan la gestión sostenible de este ecosistema, y trabajar en las oportunidades existentes que podrían contribuir a la conservación, como el turismo sostenible e incentivos forestales que pueden disminuir los retos planteados.